Ya tenía algún tiempo que no les compartía algo de lo que preparo con mis propias manitas, pero es que últimamente cocino bastante básico por el tema de no encontrar ingredientes o por un asunto de tiempo en casa.
En los actuales momentos, la compra prácticamente es para el diario así que cuando compro milanesas o pechugas de pollo intento que pueda sacar al menos dos almuerzos, entonces preparo las piezas más enteras de una forma y los trocitos más pequeños los meto en el procesador y saco pollo molido para croquetas.
Lo que hice fue condimentar con sal, pimienta, ajo triturado, cebolla, pimentón y ají dulce en cuadritos pequeñitos, mostaza y perejil. Hago unos bolitas y las pongo cilíndricas, las paso por harina de trigo, huevo batido y finalmente pan rallado y a freír.
Corren tiempos difíciles para todos, por lo que la creatividad te puede ayudar a usar lo que tienes a la mano y sacar algo rico de la nevera.
Sabores: en el paseo a la Colonia Tovar compramos una salsa tártara que combina perfecto.
Besos de chocolate
Nadeska
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